Este es el alivio que has estado esperando, rogando y soñando...
Prepárate de una vez para ponerle fin y darle un puntapié al tinnitus...
Prepárate para poder acabar con este terrible pitido que te estaba arruinando la vida...¡Prepárate para sentir, actuar y VIVIR de forma totalmente normal otra vez!
Imagínate… despertar todos los días con paz y tranquilidad...
Sin chirridos… sin silbidos, pitidos, zumbidos, ni ruidos fuertes y molestos...
Simplemente con silencio. Un apacible y divino SILENCIO.
Y además, sin náuseas, mareos o dolores de cabeza… duermes toda la noche y te despiertas fresco... ya no te sentirás deprimido, enojado o amargado...
Tus lágrimas se convertirán en felicidad y risas por abundancia...y finalmente podrás vivir al máximo, salir con amigos y familiares o también para tener largas y profundas conversaciones con tu pareja...
De repente, te sientes más activo, animado y centrado en el trabajo… y ya no tienes que evitar a los compañeros o inventarte excusas porque no has oído todos los detalles de su conversación...
Y lo más importante: es que vuelves a disfrutar de tu vida. La que esta horrible afección te estuvo robando por tanto tiempo...Puedes HACER todo lo que te propongas… SER quien quieras ser… ¡y no debes preocuparte nunca más de que aquel chirrido vuelva a atormentarte nuevamente!
Eres LIBRE… igual que miles y miles de personas que han confiado en esta solución extraordinaria y se animaron a dar el paso para probarla…
Personas como...
“No lo voy a negar… durante años, el tinnitus me arruinó la vida. ¡Se apoderó de cada situación cotidiana!
Haber encontrado una solución que verdaderamente funciona es un sueño hecho realidad. ¡Nunca pensé que iba a poder vencer esos molestos zumbidos!”
Dexter, 43, MI
“Poco tiempo después de desarrollar tinnitus, me di cuenta que me fallaba la memoria… Pequeñas cosas aquí y allá, ¡me entraban por un oído y me salían por el otro!
Era muy embarazoso.... no solamente tenía que aguantar aquel zumbido constante, sino que además no estaba rindiendo en el trabajo…
Decir que ahora mi vida es diferente es una subestimación enorme… Ahorasoydiferente y todo el mundo puede ver la diferencia en mí. Me siento muyaliviadapor haberle dado una oportunidad.”
Susan, 55, FL
No perdamos más tiempo...
Deseo que sepas quién soy y cómo pude colocar el mundo de la medicina patas arriba y empezar a mejorar miles de vidas… casi por casualidad...
Y cómo la Gran Industria Farmacéutica continúa IGNORANDO el dolor y la frustración de las personas que padecen tinnitus igual que tú, para poder seguir embolsándose MILES DE MILLONES...
Igual que tú, el día en que empecé a notar tinnitus no le di mucha importancia pensando que sería otra cosa que personas de mediana edad tenían que padecer...Algo que iba a desaparecer en pocos minutos, horas, día o en una semana… si sólo hubiera sabido que su finalidad era quedarse en mi cabeza y estar ahí durante años...Mi hija, llamada Danitza, había cumplido apenas 3 años. Al vivir en Carolina del Sur, nunca había visto la nieve...Una mañana nos levantamos y vimos más de siete centímetros de nieve en el jardín. Es mucha cantidad de nieve para nosotros...
Una mañana nos levantamos y vimos más de siete centímetros de nieve en el jardín. Es mucha cantidad de nieve para nosotros...
Durante toda la mañana no paramos de hacer muñecos de nieve, ángeles y guerras de bolas de nieve...
Cuando entramos a casa para tomarnos un chocolate caliente, Danitza me contó una broma… pero nunca llegué a oírlo...
En cambio, quedé paralizado por un pitido ensordecedor que salió de la nada...Interrumpí a mi hija mientras hablaba y le pregunté a mi mujer: “¿Oyes esto?”
Pero como respuesta tan sólo noté un movimiento de sus labios sin poder oírla…
Aquel sonido… era como el chirriar de unas uñas en una pizarra… o de metal contra metal...
Entonces pensé que tal vez todavía tenía nieve en los oídos… lo intenté todo para intentar sacarla y poder volver a oír…¡pero NADA funcionó!Solo me quedé esperando a que se detuviera solo… un día… tres días… una semana...Aquel ruido se apoderó de mi vida... no me dejaba dormir… no me permitía trabajar con in óptimo rendimiento…y no disfrutaba de mi familia.
»¿Se trataba de una infección de oído?
»¿Me había entrado un insecto en la oreja?
»¿Me estaba volviendo SORDO?
Después de 2 semanas de vivir con aquel ruido permanente en mi cabeza, no pude más y fui a ver al médico.
Jamás en mi vida me había sentido tan feliz y emocionado de acudir con un doctor… estaba demasiado ansioso de encontrar finalmente una solución… o eso era lo que yo pensaba...
Logré tener una cita con el MEJOR doctor de la ciudad. Me revisó los oídos, me tomó una gran cantidad de exámenes e incluso me sometió a un audiograma...
Cuando terminamos salió de la habitación, y la verdad que esperaba que a su regreso me traería la receta que debería de poner fin a mi sufrimiento...
Sin embargo, regresó y al ingresar dijo: “¡Buenas noticias!”
Dibujé una gran sonrisa al momento....
“Tus oídos no tienen absolutamente ningún problema".
¿!Cómo?!
“Sr. Johnson, recibe una gran cantidad de visitas de pacientes que buscan que le recete algo para que cese el ruido de sus oídos. Pero la verdad es que el tinnitus no es un problema de los oídos.”Lo escuché, pero sentía que no tenía ningún sentido… ¿es que acaso el médico no sabía qué sucedía en mis oídos? Y luego dijo una cosa que jamás olvidaré...
“El zumbido que escuchas en tus oídos es en realidad el síntoma de una condición oculta que podría llegar a ser muy grave.”Pero la verdad es que ni él, ni nadie de la comunidad médica tenía conocimiento sobre qué lo causaba... Menos saben cómo aliviar sus síntomas...Y lo más importante: tampoco saben cómo acabar con ello de manera definitiva.Me sometí a diversos exámenes, uno tras otro, empezando por los oídos y continuando por la mandíbula y el cuello, hasta acabar por los órganos internos y varios análisis de sangre.Y luego el doctor solo me recetó un montón de medicamentos… para el dolor de cabeza… aliviar los mareos… e incluso para parar las náuseas...Pero NADA de lo que me recetó detuvo aquel persistente y molesto ruido que me había costado mi esposa, mi hija, mi trabajo… ¡y ahora me estaba costando incluso mi CORDURA!
Y luego… de repente...Se marchó… al igual que todos los doctores hacen cada día con personas que sufrimos esta condición...Seguramente, si hubiera tenido un cáncer, una enfermedad cardíaca o diabetes, hubieran tenido algún tratamiento, algún plan de acción… ALGUNA ESPERANZA...Pero los que sufrimos tinnitus no tenemos esta esperanza...
En vez de esto, volvió a advertirme que aquel zumbido estaba escondiendo algo peor…
¡MUCHÍSIMO PEOR!
Para que vayamos por la vida con amargados y sufriendo por dolor
Para que cuando estamos con familiares y amigos parezcamos que la cordura ya no nos acompaña.
Así que esto es lo que hice. Empecé a vivir con ello… deseando en secreto que en algún momento desapareciera por arte de magia.
Lo que no sabía es que el problema se vuelve más grave con la edad. Y en mi caso, empeoró demasiado.
Cuando ya estaba empezando a lidiar y acostumbrarme al molesto zumbido en los oídos, comenzó a intensificarse el volumen… cada vez más... y más…
De oír un ruido blanco pasé a escuchar un chirrido ESTRIDENTE… como si una motocicleta pasada de revoluciones estuviera a lado mío...
Con el paso de los días empezó a ser desesperante... cuando tomaba largas duchas esperaba ahogar aquel pitido… La mayoría de veces me lo guardaba, por miedo a cometer algo inadecuado… Como aquella vez que le grité muy fuerte a la camarera porque me estaba sirviendo té…
Sí, en mi cabeza el tinnitus tomaba el control… hasta que otra cosa se volvió el centro de atención… otra cosa MUCHÍSIMO PEOR...De repente, me empecé a dar cuenta que tenía la memoria de un octogenarioEn un inicio olvidaba dónde había estacionado el coche… o dónde había puesto las gafas… ya sabes, pequeñas cosas.
Pero rápidamente se volvió peor...
Ya no recordaba el nombre de mis… o perdía el hilo de mis pensamientos… y hasta olvidaba fechas importantes como el cumpleaños de mi hija. Y fue en ese momento que decidí hacer algo al respecto...Sobre aquel chirrido en el cerebro que me estaba matando...Además, la pérdida de mi memoria parecía estar empeorando más y más cada día...
Intenté más de 25 cosas, pero sólo UNA funcionó.
Déjame contarte y detallarte primero lo que no funcionó por si estás pensando hacerlo… No pierdas más tiempo y dinero...
Esto te aseguro que NO me funcionó, y hay pocos casos en los que surte efecto para las personas que padecen de tinnitus...
-Los audífonos…porque solamente disfrazan el ruido de tu cabeza. Son demasiado caros, incómodos y simplemente no funcionan. Es como si agregaras otra molestia para que no sintieras la molestia original… ¡pues vaya qué pérdida de tiempo y dinero!
-Las terapias de sonido…a veces solo brindan un alivio temporal y mínimo, si es que podrían brindar alguno. En algunos casos no cambia la situación.
-Los medicamentos recetados…algunos solo redujeron las molestias de dolor de cabeza; sin embargo, no generaron ningún efecto ni en la pérdida de memoria y menos en mi tinnitus…
-Los remedios herbales…redujo un par de dolencias, pero mi tinnitus siguió siendo más intenso como siempre…
-La acupuntura…Realmente no me funcionó en absoluto.
-La meditación y los masajes…tampoco surtieron efecto en mi tinnitus…
-Y los antidepresivos...solo me hacían sentir como si fuera un zombie… ¡Un zombie con ruidos en los oídos!
En resumen…
Tuve que ser realista en el hecho de que no había NADA para acabar con mi sufrimiento… ¡absolutamente NADA que me pudiera ayudar a detener la pérdida de memoria y el deterioro de mi cerebro!
Así que llegó el momento que tomé las riendas de mi salud — y sobretodo de mi FUTURO — ¡con mis propias manos!
Era urgente hacer algo… porque me RESISTÍA a no pelear.
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